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Foto del escritorLuz Marcela Vera

Lic. Antonio Torres Gomez - Todos tenemos el deber de servir en el puesto que se nos asigna

Actualizado: 8 ene 2021

En algunos momentos de crisis política, un guanajuatense distinguido ha abandonado su cubículo

universitario, donde está entregado con pasión al cultivo de sus verdaderos intereses: la enseñanza y la investigación filosófica y jurídica, para colocarse en la posición que le señala su Partido. Demostrando que un pensador, un hombre teórico, puede ser también un hombre práctico.


Lo que más resalta de su cara son sus ojos llorosos, cansados de grandes bolsas, muy parecidos a los del muralista guanajuatense Diego Rivera. Lleva bigote ralo y entrecano.

En su mano derecha aprisiona unos lentes pequeños, listos para ser usados en su momento. Mientras nos acomodamos en el despacho de su casa, nos han traído una charolilla con una botella de Oporto, agua y un platito de frutas secas. La puerta discretamente entreabierta, no permite pasar mayor ruido. El ambiente para una entrevista está finamente arreglado.

LM.- Licenciado: ¿A qué se dedica actualmente?

TG.- En principio y como ha ocurrido siempre, sigo yo trabajando en la Universidad de Guanajuato.

Tengo muchos años de servir la cátedra de Introducción al Estudio del Derecho, que se imparte en los primeros meses de la carrera. Al mismo tiempo, tengo a mi cargo la coordinación del Departamento de Investigaciones Jurídicas, donde editamos un Boletín de Información Jurídica, en el que colaboran algunos maestros de la Escuela de Derecho, cada uno en su especialidad, y organizamos conferencias en diversas ciudades del Estado. También formo parte de la Comisión Estatal Editorial.

LM.- ¿Y cuántos años lleva en la Facultad de Derecho?

TG.- Cuarenta y tantos. Actualmente soy el decano de la Facultad de Derecho. Desde el año de

1937 que llegué a Guanajuato, muy recién recibido, desde entonces cumplo con este compromiso docente, y cuando me he venido a León, ya sea a ejercer mi profesión o a desempeñar otro cargo,

solicito licencia en la Universidad o, como ahora, recorro la carretera diariamente... Pues la enseñanza es una de las tareas que he desempeñado con el mayor agrado.

Pero tiene sus altibajos, como todo. No siempre se desenvuelve uno con la misma comodidad,

porque no todos los grupos responden de la misma manera. Cuando los grupos son reducidos, puede uno conocer personalmente a los alumnos y estimularlos, pero cuando el grupo va es de 60 ó 70 alumnos, puede resultar en un momento dado contrario a los propósitos de la enseñanza. Digo yo, digo...

Su saco gris a rayas, pantalón liso, zapatos, corbata y pañuelo azul marino resaltan por la impecable camisa blanca que lleva en esta ocasión. Y por la posición que ha tomado al sentarse, alcanza mi vista a descubrir que usa tirantes.



DOS VECES RECTOR DE LA UNIVERSIDAD


LM.- ¿Cuáles son los proyectos de la Comisión Editorial?

TG.- Desde luego, en la Comisión hemos estado seleccionando obras que merecen ser editadas.

La actividad ha sido en un principio un tanto lenta, pero como usted sabe está por iniciar su trabajo la Editorial del Gobierno del Estado, lo que tendrá que repercutir benéficamente en esta área.

LM.- A usted le tocó intervenir en la fundación de la Universidad de Guanajuato con Armando Olivares. ¿Me puede platicar sobre ello?.

TG.- Bueno, mire usted; la Universidad tiene muy diferentes etapas, y cada uno de nosotros ha contribuido con algún esfuerzo a fin de ampliar su radio de acción cultural. A Olivares Carrillo le corresponde gestionar, precisamente, la expedición del decreto que convirtió al Colegio del Estado en la Universidad de Guanajuato.

El viejo Colegio de La Purísima fundado en 1732, se elevó gracias a él a la categoría de Universidad.

Yo asumí la Rectoría posteriormente en dos ocasiones: la primera, durante unos cuantos meses durante la administración de Nicéforo Guerrero; la segunda durante todo el periodo de gobierno del licenciado Aguilar y Maya, de 1949 a 1955. En esa época la Universidad tenia un subsidio muy raquítico, que estaba fundamentalmente destinado a cubrir los sueldos del personal. Sin embargo, durante mi gestión se crearon muchas nuevas carreras.

Empezó a funcionar la Escuela de Filosofía y Letras, que contó con elementos muy destacados, de la talla de Luis Rius, poeta español recientemente fallecido; de Ricardo Guerra, que más tarde seria director de la Facultad 'de Filosofía y Letras de la UNAM: de Luis Villoro. Todos colaboradores distinguidos que ocuparon cátedras o direcciones como el filósofo español Francisco Carmona Nenclares, Pascual Buxó, Alfonso Bernal, José Lanuza, un guanajuatense ya fallecido, muy estimado, José Rojas Garcidueñas. La Escuela de Arte Dramático estaba a cargo de Enrique Ruelas; la de Artes Plásticas la dirigía nuestro paisano Jesús Gallardo; la de Música, la Orquesta Sinfónica y el Cuarteto Clásico estaban a cargo de José Rodríguez Frausto.

LM.- Una Época de Oro...

TG.- Se ha dicho que fue una época de gran trascendencia y significación para Guanajuato. Parece increíble que con tan poco dinero se hayan hecho tantas cosas.

De voz tenue y rápido hablar, hace una pausa para contestar lo siguiente:

"El aspecto científico y técnico debe de estar en equilibrio con el progreso humanístico, por eso propicié la fundación de la Escuela de Filosofía y Letras. En esa época había una gran inquietud por la investigación tecnológica. De manera que nos interesaba la cultura integral, y en consecuencia fundamos las carreras de ingeniero químico, biólogo y químico farmacéutico. Los laboratorios empezaron a funcionar bajo la dirección de Armando López Martin del Campo, que realizaba investigaciones en el área de la física nuclear. Entonces eran alrededor de cuatro mil alumnos, incluyendo las dependencias establecidas en León, Irapuato y Celaya".


DIPUTADO LOCAL Y FEDERAL


LM.- Pasando a otro terna, licenciado, ¿en qué año han sido sus diputaciones y por cuáles distritos?

TG·- Fui diputado local durante un periodo muy breve, precisamente porque tuve que retirarme para continuar al frente de la Universidad. La Ley Orgánica de la Universidad no permite que el Rector esté vinculado a la actividad política, por razones obvias.

No porque la actividad política no tenga relevancia para nuestro país o para nuestro Estado, sino para que no descuide su gestión.

Posteriormente, fui diputado federal a la cuadragésima novena legislatura, por León. De 1973 a 1975.

Cabe destacar que el Lic. Torres Gómez hizo sus estudios de licenciado en Derecho en la UNAM para después revalidarlos en la Universidad de Guanajuato con titulo de Notario Público. Teniendo el privilegio de ser discípulo de: Antonio Caso, Alfonso Caso, Francisco González de la Vega, Hilario Medina y desde luego, don José Aguilar y Maya.

LM.- ¿ Y era usted un alumno muy inclinado al estudio?

TG.- Muy brillante, no. Tuve mis altibajos. Se me dificultaban terriblemente las matemáticas. Por poco no concluyo el bachillerato, por los tropiezos en esta materia.

Entonces quizá hubiera sido para mi penoso declararlo, pero actualmente no, porque considero que no tenemos aptitud para todo.

Parece que la mente se niega a seguir demasiados caminos.


GOBERNADOR DEL ESTADO


LM.- Platíqueme cómo llegó usted a ser Gobernador Interino del Estado...

TG.- Bueno, mire usted, fui más bien Secretario General del Gobierno encargado del despacho del Poder Ejecutivo, con motivo de la renuncia que presentó José de Jesús Castorena. Asumí el cargo durante un instante muy breve, mientras tomaba posesión don Luis Díaz Infante. Fue precisamente por los famosos acontecimientos del 2 de enero, a raíz de los cuales se desconoce al gobierno de don Ernesto Hidalgo.


PRESIDENTE MUNICIPAL


LM.- Licenciado, ¿no fue sorpresivo para usted que le pidieran asumir la Presidencia Municipal al renunciar Fito Padilla?

TG.- Oiga usted, más que sorpresivo, fue un motivo de inquietud muy grande por la seria responsabilidad que tomaba. Estaba una obra inconclusa, y habla un desconocimiento por mi parte de las cuestiones administrativas pendientes, del engranaje especifico. A esas alturas de mi vida me jugaba una carta difícil. Me jugaba el todo por el todo, sin haberlo pretendido ni requerido por algún motivo. Pero siento que hice lo que podía hacer. Al tomar posesión del cargo, me comprometí a concluir en lo posible la obra material que estaba en proceso.

Además, durante mi gestión traté de darle énfasis especial a la promoción de la cultura.

LM.- ¿Podemos decir que su vida tiene esencialmente un sentido político?

TG.- A propósito de ese tema yo he considerado que en principio todos tenemos el deber de prepararnos de la mejor manera para poder servir en el puesto que se nos asigne. Pero yo a la política he ido por accidente, no como una meta. Yo he salido en un momento dado de la Universidad o de mi despacho para ir a ejercer un cargo de tipo político que no he podido eludir, porque dentro de los compromisos del ciudadano está el de ejercer los cargos de elección popular, directa o indirecta.

Y ya en el cargo hay que cumplir con el mayor empeño, con la mayor entrega... Yo decía hace poco que no debemos tomar al Partido como una agencia de empleos, porque al invitar a colaborar en alguna cuestión especifica toma en cuenta fundamentalmente, digo yo, digo, la aptitud para la función pública. Pero para mi la actividad que tiene mayor atractivo es la actividad, dijéramos universitaria.


EL GUANAJUATENSE


LM.- Por último licenciado, ¿Cómo siente qué somos los guanajuatenses?

TG.- El guanajuatense es una gente que capta hasta el fondo de las cosas, y las analiza, las des menuza con profundidad y no se deja guiar fácilmente por la opinión de otro, sino que le agrada tener su propia convicción, su propia determinación.

Guanajuato ha tenido una significación muy alta tanto en el terreno del pensamiento como en el de las artes, desde la Independencia de México a nuestros días.

En la trayectoria que distingue al Lic. Torres Gómez, aparte de los incluidos en esta entrevista,

destacan los siguientes cargos: Juez de lo Civil, Secretario General del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Gto. , Magistrado y Presidente de dicho alto cuerpo, Primer Vicepresidente de la Asociación Nacional de Universidades e Institutos de Enseñanza Superior en la República, Director de la Escuela Preparatoria de esta ciudad, Director de la Escuela de Derecho de la Universidad de Guanajuato, entre otros.

Enorme currículum vitae que descubre la tarea que, dentro del respeto al valor de la libertad marca la doctrina y el rumbo del hombre.

5 Abril/1987

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